"A mi que me cuentas..¡no nací ayer!"
Decía Laura, hacéndola de Doctora Corazón,
y como que refiriendo su extensa,
-y obviamente falsa- vida sexual
en aquellos años del bachillerato..
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Laura era mayor que el resto por dos meses y
creímos que aquello le daba madurez, y por tanto autoridad..
"No..me gustaría ayudarte amigo, pero mejor pregúntale a Laura"
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Los años ya pasaron...
Muchos olvidaron su nombre,
"Ah sí, Laura-no-nací-ayer" recordaban
antes de volverla a olvidar la semana siguente...
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Ahora que las arrugas y las lonjas
se apoderan de nuestra galanura juvenil,
podemos parafasear con categoría aquello de
"A mi que me cuentas..¡no nací ayer!"
eso claro, si acaso alguno pidiera un consejo...
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¡Vamos! ¿a quien le importa todo esto?
Finis